La mayoría asocia a las hamburguesas con la comida rápida, con la comida chatarra. Pero esto no tiene que ser siempre así, ya que podemos preparar hamburguesas nutritivas, sanas y ricas, y acompañarlas con diferentes verduras o vegetales de estación. Podemos preparar hamburguesas de carne magra de res, hamburguesas de pescado, hamburguesas de pollo, de vegetales, hamburguesas de soja.
Podemos utilizar carne de pollo o de pavo, mezclada con un poco de cebolla y ajo en crudo, todo ello muy picado. Para que nos quede una masa unida, pero no demasiado compacta, agregamos un huevo batido, miga de pan remojada en leche y una pizca de sal. El modo idóneo de cocinarlas es en una plancha o sartén antiadherente a fuego medio. De ese modo, el calor llegará también al centro de la hamburguesa.
Una vez cocinadas, podemos acompañar con un salteado de setas por ejemplo y una salsa de yogur. Con esto se consigue un plato original, más digestivo y menos calórico.
Las recetas con pescado, sobre todo con pescado blanco también dan buenos resultados. Para compactar la masa podemos agregar una miga de pan remojada en leche o en un caldo de pescado. Tras salpimentar el conjunto, es importante enharinarlo para que no se pegue a la plancha caliente que utilizaremos para cocinarlo con un poquito de aceite de oliva. Como condimentación se puede añadir un poco de cebolla cocinada a fuego suave con aceite y luego escurrida, junto con un poco de albahaca fresca picada y una pizca de ajo.
A la hora de presentar la hamburguesa de pescado, la guarnición puede ser la clásica de lechuga con tomate, o tener un toque más divertido. Utilizar unas rodajas de pepinillo, alcaparras y aceitunas en vinagre que, junto con una mayonesa ligera, nos da como resultado una salsa tártara.
Otra opción para enriquecer la mesa son las hamburguesas vegetales, elaboradas con legumbres, con arroz o con soja texturizada. El punto de partida son las legumbres o arroz ya cocinados y condimentados a nuestro gusto. Para compactarlos bien se puede utilizar un huevo crudo, un huevo cocido, o un poco de pan remojado en caldo de verduras.
El siguiente paso en la preparación de estas hamburguesas es darles una capa de protección para evitar que se desmonten en el momento de cocinarlas. Para ello, en lugar de solo enharinar, podemos empanarlas pasándolas por harina, huevo batido o batido de soja y luego pan rallado. Si optamos por este método, en vez de asarlas es preciso freírlas en una sartén con aceite de oliva que no esté excesivamente caliente para que el calor penetre en el interior de la hamburguesa.
Hamburguesas de carnes blancas
Podemos utilizar carne de pollo o de pavo, mezclada con un poco de cebolla y ajo en crudo, todo ello muy picado. Para que nos quede una masa unida, pero no demasiado compacta, agregamos un huevo batido, miga de pan remojada en leche y una pizca de sal. El modo idóneo de cocinarlas es en una plancha o sartén antiadherente a fuego medio. De ese modo, el calor llegará también al centro de la hamburguesa.
Una vez cocinadas, podemos acompañar con un salteado de setas por ejemplo y una salsa de yogur. Con esto se consigue un plato original, más digestivo y menos calórico.
Hamburguesas de pescado
Las recetas con pescado, sobre todo con pescado blanco también dan buenos resultados. Para compactar la masa podemos agregar una miga de pan remojada en leche o en un caldo de pescado. Tras salpimentar el conjunto, es importante enharinarlo para que no se pegue a la plancha caliente que utilizaremos para cocinarlo con un poquito de aceite de oliva. Como condimentación se puede añadir un poco de cebolla cocinada a fuego suave con aceite y luego escurrida, junto con un poco de albahaca fresca picada y una pizca de ajo.
A la hora de presentar la hamburguesa de pescado, la guarnición puede ser la clásica de lechuga con tomate, o tener un toque más divertido. Utilizar unas rodajas de pepinillo, alcaparras y aceitunas en vinagre que, junto con una mayonesa ligera, nos da como resultado una salsa tártara.
Hamburguesas de vegetales
Otra opción para enriquecer la mesa son las hamburguesas vegetales, elaboradas con legumbres, con arroz o con soja texturizada. El punto de partida son las legumbres o arroz ya cocinados y condimentados a nuestro gusto. Para compactarlos bien se puede utilizar un huevo crudo, un huevo cocido, o un poco de pan remojado en caldo de verduras.
El siguiente paso en la preparación de estas hamburguesas es darles una capa de protección para evitar que se desmonten en el momento de cocinarlas. Para ello, en lugar de solo enharinar, podemos empanarlas pasándolas por harina, huevo batido o batido de soja y luego pan rallado. Si optamos por este método, en vez de asarlas es preciso freírlas en una sartén con aceite de oliva que no esté excesivamente caliente para que el calor penetre en el interior de la hamburguesa.